El expelotero y ahora entrenador de jóvenes prospectos, Yordy Cabrera, salió en su propia defensa públicamente por primera vez luego de que se conoció la muerte de Ismael Ureña Pérez, el adolescente de 14 años que falleció tras supuestamente ser inyectado con del esteroide veterinario “caballín”.
Cabrera, publicó un video en la red social de Instagram de la academia de béisbol que lleva su nombre, con la intención de “aclara” que no tiene nada que ver con la muerte del adolescente, y que tiene pruebas para demostrarlo.
“He tenido una carrera implacable, he recibido varias extorsiones, la cuáles fueron el motivo que hizo que explotaran estas acusaciones hacia mí, pero tengo pruebas suficientes para demostrar que soy totalmente inocente de lo que se me está acusando”, dijo Cabrera.
El exlanzador dijo que también es falso que él ha estado amenazando a algunos vinculados en el caso del joven. Enfatizó que nunca ha sido una persona problemática, y mucho menos ahora que es cristiano.
“Desde hace varios meses mi familia y yo decidimos entregar nuestra vida al Señor, por lo que si antes yo era incapaz de hacer algo malo y violento, ahora mucho menos que soy cristiano. Nunca he tenido problemas en mi carrera, mi nombre está limpio”, añadió.